Todos lo hemos visto, cuando cortamos una manzana y la dejamos expuesta unos minutos, la carne de la fruta se oscurece. Esto pasa no solo con la manza, sino también frutas similares como la pera y también en alimentos como las papas y los champiñones.
Este proceso de pardeamiento es una oxidación, pues es el resultado de la acción del oxígeno contenido en el aire en combinación con los compuestos químicos de la fruta, en concreto sobre los fenoles. En la reacción interviene como catalizador una enzima (por eso se le llama pardeamiento enzimático): la polifenol oxidasa (PPO), gracias a la cual los fenoles se combinan con el oxígeno para transformarse en quinonas, que se polimerizan o reaccionan con grupos amino de diferentes compuestos formando compuestos coloridos que reciben el nombre de melaninas y que tienen propiedades antimicrobianas, y que podrían ser un mecanismo de defensa de los vegetales contra infecciones.
Y si les pareció demasiado químico el párrafo anterior, resumiendo se trata de la transformación de un compuesto en otro de diferente color debido a la presencia de oxígeno y acelerado por una enzima. Las frutas donde se presenta este oscurecimiento (o browning en inglés) son aquellas que tienen alta concentración de PPO.
Ojo no confundir con el pardeamiento no enzimático o Reacción de Maillard, de la que hablaremos otro día.
En el campo de los alimentos, el pardeamiento enzimático puede ser un problema muy serio en frutas, champiñones, patatas y otros vegetales, e incluso en la industria del vino, al producir alteraciones en el color que reducen el valor comercial de los productos, o incluso los hacen inaceptables para el consumidor, no tanto por cambios en el sabor sino en la apariencia. Estas pérdidas son muy importantes en el caso de las frutas tropicales, productos trascendentales para la economía de muchos países poco desarrollados. Es por eso que se desarrollan técnicas para prevenir esta oxidación, y para eso les dejo el link a Alimentaria Online.
Fuentes: Bioquimica de Alimentos y Saber Curioso.
En el campo de los alimentos, el pardeamiento enzimático puede ser un problema muy serio en frutas, champiñones, patatas y otros vegetales, e incluso en la industria del vino, al producir alteraciones en el color que reducen el valor comercial de los productos, o incluso los hacen inaceptables para el consumidor, no tanto por cambios en el sabor sino en la apariencia. Estas pérdidas son muy importantes en el caso de las frutas tropicales, productos trascendentales para la economía de muchos países poco desarrollados. Es por eso que se desarrollan técnicas para prevenir esta oxidación, y para eso les dejo el link a Alimentaria Online.
Fuentes: Bioquimica de Alimentos y Saber Curioso.
2 comentarios:
es bueno saber eso, siempre he tenido esas dudas... Aca es comun que mucha gente ya no quiera el aguacate (palta) por eso... y ni hablar del guacamole... pero yo si sabia que no es mas que un efecto en la superficie y que el producto muchas veces esta en buenas cndiciones... sin duda, uno tambien se alimenta por los ojos... Checare algunos consejos, para no tener que andarme peleando denuevo, tratando de explicar que la comida esta buena y no debe tirarse solo por un ligero cambio de color.
Me parecio muy bien su explicacion, ya lo habia estudiado en la carrera (nutricion y ciencia de los alimentos) pero se me hizo un a manera clara y precisa de explicar el proceso. Gracias
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